FUTURO IMPERFECTO

Fue imposible para nuestros ojos

determinar

si lo que manchaba el suelo

Eran las negras cucarachas

en que se transformaron

las ilusiones que iban muriendo

O esas lágrimas pegajosas

que siembran los atrios

de derruidos templos

Sentíamos que estábamos presos

de ese diálogo entre el miedo

y la exacerbación del sentimiento

Que delimita desajustados

los tiempos de obviar

los puntos y las comas

Que intentan matizar

las airadas ráfagas del deseo

Que inoculan inevitable la duda

en el osado pálpito de los cuerpos

Era evidente que debíamos atravesar

sin mirar sus bordes

los inescrutables cauces

del silencio

Levantar las barreras

que alza el pensamiento

Cuando la sangre se desborda

sin valoración de riesgos

Quizás ya no sea el momento

de dilucidar

Si lo que ayer hemos hecho

es pecado de omisión

O la debida penitencia

a que obliga la pasión

Porque para ella nunca habrá

otra forma de conjugarla

que en futuro imperfecto

(José M. Huete García, Septiembre 2014)

D.A.R.