OSCUROS CAMINOS
He averiguado
que hay un sórdido camino
por donde me disuelvo
poco a poco
Sin que llegue a coagular
ni siquiera el llanto
En su barrizal de lamentos
se ahogan los acordes
de aquel viejo saxo
Las huelas de un tiempo
que doblaba cada esquina
con pausados pasos
Ya el quejido obstinado
no establece los límites
entre la eterna espera
y el morir con adelanto
Entre el beber febril
y el saciarse de un trago
Todo desagua rápido
sin que murmure el río
Sin permitir el goce
de que una hoja seca
sacuda sin aviso
la paz del remanso
Me voy desnudando
de los ramajes del árbol
Del tronco tallado
de verano en verano
cuando eran inocentes
los nombres y las manos
Me voy apartando
de la orilla del océano
Me voy apagando
como fuego aventado
Me voy olvidado
de los besos que callaron
Cuando de mi
quede solo un trazo
No recuerdes
que me has amado
Que nunca fui importante
para decirme un epitafio
(José M. Huete García. Enero 2015)
D.A.R.
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