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sábado, 23 de febrero de 2013


SIN TIEMPO NI DISTANCIA

He sentido esta noche latir en mi garganta
el mas profundo grito de rebeldía,
es el indomable anhelo de tenerte,
ni el tiempo ni la distancia podrán someterme.

He sentido brotar de mi boca a borbotones
el sabor mas amargo de mi sangre,
el que hiela el palpitar de mis arterias,
el que hace que de hiel escriba los poemas.

Porque nunca seré propietario de la llave
que en lo mas recóndito de mi silencio
como parte de mi pueda guardarte,
que pueda tenerte cuando no estás ausente.

¡Solo así me es permitido amarte!

Eres la promesa inalcanzable
de mi nostalgia interminable.
La lágrima que nunca se acallara
en mi alma insobornable.

Con la fuerza de Hércules en sus trabajos
doblaré los hemisferios para hacerme
beso eterno en tu boca,
ascender en ella a mi último Gólgota.

Como Ulises redivivo te soñaré Penélope
tejedora paciente de una nueva Ítaca
hasta su orilla  navegaré en tu piel
y allí embarrancaré para siempre.

Cual Cronos omnipotente
doblegaré el impasible caminar del tiempo,
romperé todas las manecillas de los relojes
que existas como único instante de mi mente.

¡Solo así, domeñando el tiempo y la distancia
podré amarte y esperar que  llegue la muerte!

(José M. Huete García. Diciembre 2011)

jueves, 21 de febrero de 2013


EN EL REVERSO DEL DESTINO

No es dolor ni miedo lo que siento
Cuando esta soledad inquietante
Clandestina mi silencio invade,
Se aturden los sentidos
En una quietud paralizante,
Y se ahoga el sentimiento
En un mar de ignorados puertos.

El tiempo adquiere ese tono
De crepuscular trámite
Para justificar
Esa incerteza del destino
Del que los dioses
Guardaron la llave
Hasta que el azar de la muerte
Fijara el instante
En que ya solo queda el abismo
Donde el sentimiento
Se derrama en un inmenso vacío.

Y no hay quimera
Ni bandera al viento
Ni recio armamento
Para ganar esta batalla
En que en un instante
Todo se gana o se pierde,
Que cuando un abismo se abre
Otro se cierra,
En que todo vale
Para ponerle cara a lo sueños.

(José M. Huete García, Octubre 2011)

AMO LA DESNUDEZ DE TU ALMA

Me pregunto tantas veces
Si el amor tiene normas no escritas
Que se han de respetar
Aunque la pasión cruja en el alma,
Si es la clave del arco
Que sostiene toda circunstancia,
En que el sentimiento se desgarra
Y busca el abecedario de las lágrimas.

Son preguntas que en tu piel me responden
Cuando en ella escribo huellas indelebles,
Cuando en tus abismos me hago peregrino
En la búsqueda del Santo Grial de lo eterno,
Me desnudo de inútiles ropajes
Para de tu humedad hacerme mendigo,
De tus aliento de licor aún no disipado
Bebedor empedernido.


Como tenerte entre sedas y zafiros,
Como azucena de intacto rubor sorprendida,
Si la pasión a veces entre violetas nace
Y otras es barro de lodazales,
Si puede tener el aroma de los alhelíes
O el olor acre del bosque ya quemado,
Si  en el sudor de la piel contra la piel
Es donde el fuego hace ceniza de los nardos.

¡Como dejar de amarte
Si todo de ti me enardece
Aunque no lleves botines de piel
Ni tus labios sean ramillete de claveles!

(José M. Huete García. Febrero 2013)

TIEMPO DE SILENCIO

Hoy te llevo en un rincón del alma,
Te he guardado con mucho cuidado
Ahí donde los sentimientos
Aún son quejido de guitarra,
Donde se armoniza el lamento
Y la sosegada voz del silencio.

De nada valdrán mis palabras
Si no son de lluvia mansa,
Si son torrente que se desborda
Sobre surcos que ya nadie labra,
Si en tus campos sobre los sueños
Ya pasó el filo de la guadaña.

De que valdrá cada verso
Si este poema no lo escribo
Tiritando por dentro,
Si tu no percibes el temblor
Que convierte en eterno
Cada suspiro de un “Te quiero”.

No es de buen estratega
No saber cual es el momento
De desnudar a la flor
Y que sus pétalos no queden
Pisoteados en el suelo.

(José M. Huete García. Febrero 2013)

miércoles, 20 de febrero de 2013


REMANSO

Amor,
Cuando a mi te acercas
Y con tu mirada buscas
Los lindes de mi alma,
La aire se hace caricia,
Tu voz suspiro del alba,
Y entre tus pestañas
El tiempo se detiene
En translúcida calma.

Todo ocurre despacio
Como el brotar del geranio,
Como la muerte del árbol,
Como la espera
Que certeza se despereza,
Como huella en la memoria,
Como pisada de nostalgia
Cuando se hace tristeza.

Amor,
Tu eres el remanso,
Lago de agua clara,
La paz en la tormenta,
La lluvia que anuncia
La serena melodía
Del color de la Primavera
Cuando en flor germina
La soledad de mis lágrimas.

(José M. Huete García, Febrero 2013)

martes, 19 de febrero de 2013


EN LA BRUMA DEL TIEMPO

Sé que este camino ya lo he recorrido,
Alguna vez fui ángel
Con la cítara a cuestas,
Las alas blancas sin mancha,
La inocencia intacta
Y las pisadas sin dejar huellas.

Hasta que las puertas del infierno
Se abrieron
Y pude ver que es falso
Que el martirio sea el fuego,
Ni que la expulsión del Paraíso
Se debiera a amarte con deseo.

Sé que este camino ya lo he recorrido
Aunque no sepa el motivo
De sentirme siempre perdido,
Si es verdad que tenga inicio y final,
Ni cual es ese pecado original
Que me me convirtió en ángel caído.

Sé que es esta incertidumbre
De no saber la distancia
Entre el amor y su nostalgia,
De no saber cual es el tiempo
Que necesita el olvido,
Lo que me precipita al abismo.

¡No es la ausencia de ti
La soledad y su martirio,
Es no saber si alguna vez,
Hubo un simple instante,
En que ángel o demonio
Sea cierto que te he tenido!

(José M. Huete García. Febrero 2013)

OJOS DE PASIÓN PLENOS

Podría mirar el mar con otros ojos,
Esos que recuestan su mirada
En la orilla de las tardes mansas,
En que las gaviotas callan
Porque las olas vienen llenas
De guirnaldas de polvo de estrellas,
Los fugaces sueños de la noche,
Con los que ávidas se sacian.

¿Por qué no?

Podría negar que mis pupilas
Tienen mil ventanas,
Por donde La Luna se desliza
Y sus rayos en ellas me clava
Como puñales de plata,
Negar que su acero incoloro
Llega hasta el fondo de mi alma
Y en lágrimas se desangra aterida.

¿Por qué no?

Podría girar mis ojos hacia dentro,
Ser una paciente hormiga
Reconstruyendo de silencio
Los resquicios de tu recuerdo
Por donde se me escapa la vida,
Cuando la nostalgia me abraza,
Y solo en el frío de mi espalda
Siento que te tengo.

¿Por qué no?

Podría negar lo evidente,
Escudarme en el reflejo incierto
Del espejo que quebró el destiempo,
Podría mentirte sin miedo
Y decirte que ya no te quiero,
Que prefiero que me invada el tedio,
A seguir escribiendo estor versos
Donde aún me quemas como fuego.

¿Por qué no?

¡Pero es que no puedo,
Es que aún  habita la pasión
En mis ojos, que aunque ciegos,
No están muertos!

(José M. Huete García.Noviembre 2011)

MUJER DE OTRO TIEMPO

Sé que ya no es el tiempo
De ir a ver como paseas
Engalanada con tu falda de vuelo
Tu corpiño de raso,
La mantilla bordada a mano
Y el sutil coqueteo
Del abanico entre tus dedos.

Sé que ya no es el tiempo
Que para decirte un “te quiero”
Deba comprar un ramillete
De rojos claveles
En la feria de las flores,
Y ofrecértelo a tu paso,
Mientras suena una copla
O un apasionado bolero.

Sé que ya no es el tiempo
De este poema romántico,
Del desasosiego en el alma
Por conseguir tu mirada,
De la palabra ensayada
Para susurrarte muy bajo
Que de la pasión
Mi corazón es prisionero

Sé que ya es el tiempo
Que decirte un “Te amo”
Es iniciar el camino
Desde tus ilusorios contornos
Hasta tu corazón desnudo,
Desde el sabor de tus labios
De amargura desabrida
Hasta el confín de tus sentidos
Donde el deseo ya no es sueño,
Y el peregrinar hasta tu centro
El sendero mas incierto.

(José M. Huete García, Febrero 2013)

lunes, 18 de febrero de 2013


AMOR

Inicio el camino
con el corazón desprendido
de todo egoísmo
y a ti, sin condiciones
me entrego.

Ritual iniciático
de la palabra conjugada
en verbo.
En tus aguas sagradas
Me bautizo,
Arrodillado  comulgo
En tu venida
En alma y cuerpo.

Bebo de tu sangre
Hasta el sabor amargo
De tu tuétano,
Hasta el dulce refugio
De tu sexo.

Sublimo la carera
Desbocada del tiempo,
Y apaciguo
Mis instintos,
O el recodo secreto
De mi sentimiento.

(José M. Huete García. Febrero 2013)

domingo, 17 de febrero de 2013


EL CAMINO DEL ÉXTASIS

Cuando te amo
y penetro en tus desiertos
de soledades,
no se si  te estremece
el viento del deseo,
o sentir que revive
el fuego de tu infierno.

Cuando te amo
Y adivino en tu mirada
La ardiente tonalidad
De la lujuria,
No sé si tienes los ojos
De la hembra en celo.
O si entre tus pestañas
Germina claveles rojos.

Cuando te amo.
Y me ofreces tus labios
Anhelante de mis besos,
No se si tu boca
Es panal de miel,
O es  vaso de áspero vino
Que me emborracha
Si trago a trago lo bebo.

Cuando te amo,
Y entro en la mas profunda
Humedad de tu sexo,
No se si lo que escucho
Es el salvaje rugido
De la catarata
Vertiéndose en río.
O es la voz perdida
Del éxtasis de lo eterno.

(José Huete García. Febrero 2013)

EL PRIMER BESO

Recibo una carta
Sin texto
Cuartilla en blanco
Doblada
Con cuidado
Huele a lugar lejano
A musgo
A tirabuzones
A zarzamora
Orujo
Vestidos hechos a mano
Bien planchados,
A música de los Beatles
Aznavour
“Ma vie”
Y canción del verano.

Y en el remite
Solo un beso
Rojo
Bien delineado
Son tus labios
Que me devuelven
El que te robé
Con la incertidumbre
De haber pecado.

¡Y ahora sé
Que el tiempo vuelve
Inmaculado!

(José M. Huete García. Febrero 2013)

INSURGENTE

Miras al cielo y te preguntas
En que rincón esta Dios,
Hacia donde has de alzar tu voz
Para que te alcance esa lluvia
Que no mancha de barro
Tu piel flagelada y desnuda,
Donde está esa nube blanca
Que cuando llore
De maná y agua cristalina
Sacie tu hambre empedernida.

Miras tus pies descalzos
y te preguntas si para dejar huella
es necesario calzar zapatos.
Si eres menos que un perro
Que puede marcar su territorio,
Por qué de nada sabes el nombre
Porque nada te pertenece,
Por qué cuando te vayas
Tu recuerdo será estiércol
Y nadie te guardara como cenizas.

No te atreves a que tus ojos
Se quiebren como cristales
Cuando el alma te duele
Mas que el hambre en tu vientre,
Por qué cuando una mirada
Desde arriba te alcanza
Es para ponerte esas cadenas
Que te hacen sentirte diferente,
Por qué tus heridas han de lamerse
Si es veneno tu saliva.

Y la escupes al suelo
En los bordes de tu destierro,
Y ante tanto decreto
Que el sufrimiento te impone
Aprende que la ira
Sí te pertenece.
Y ante el general asombro
Llenas tus puños de rabia.
Te declaras insurgente.

(José M. Huete García. Febrero 2013)

EN MI VIENTO TE LLEVO

Quisiera ser ese viento cálido
Que penetra hasta el mas gélido
De tus recovecos,
Desnudar tu frío,
Derruir tus templos de hielo,
Socavar tus credos,
Y cuando te sientas desnuda
Abrigarte con alas de fuego.

Qué mas da que te creas
Roca de cuarzo en el desierto,
La que nunca ha de ser arena
Porque ya se agotó la lluvia
Sobre tus cristales,
Que sobre las dunas
No hay torrente que te inunde,
Que no hay sombra en el oasis.

Que mas da,
Que te equivoques
Intencionadamente,
Y quieras ser madero
Donde el tiempo te crucifique,
Si yo ya te hice
Palo mayor de mi velero
Y para tu dolor ya divisé puerto.

(José M. Huete Garcia, Febrero 2013)