Seguidores

sábado, 3 de agosto de 2013

TIEMPO DE TRÁMITE

Amor,
He de confesarte
Que hay cosas que no te digo.
Insignificantes
Sin el peso de lo transcendente,
Pero me acompañan
Constantemente.

El ibisco tiene una mirada
De rojo tímido
No se atreve
A asomarse a mi ventana
A contarme historias
De hiedra y lluvia temprana.

En los jardines
Hay un gato grande y vago
Parece una figura de piedra
Mirando estático
Como vuelan los gorriones
Pero sin cara de hambre.

Los geranios
Enrojecen violentamente
Mas debe ser la ira
Que el viento les produce
Les arranca los pétalos
Y no saben donde los conduce.

Así son tantas horas
Largas como ovillos de hilo
Que tejen y destejen
Este trámite
Del tiempo que muere
Expectante.

(José M. Huete García, Agosto 2013)

D.A.R.

viernes, 2 de agosto de 2013

PECADO DE NOSTALGIA

Se que la noche
Tiene cara de patraña
De falsa mirada
De realidades inestables
De danza de sombras
Sin pasos de baile.

Se que los navíos
Enciende fuegos fatuos
Que no iluminan los mares
Son adornos en su mástil
Que las palabras
Se agrandan en ecos
Para parecer indubitables.

Ya sabes que añorarte
Es mi costumbre
Mezclar tus besos
Con mis soledades
Creer que es sentir eterno
La búsqueda interminable.

No te sientas al alba
Reina de corazones
Cuando se agote
En vaso vacó la noche
Te diga que entre gemidos
Pronuncié tu nombre.

No me permitas
Vivir en falsas ilusiones
Ni morir soñándote
Si la distancia de mi deseo
Y el que en fuego te arde
Es mas larga que un centímetro
Mas tenue
Que el roce de un suspiro.

¡Si he de ser condenado
Que no sea por pecar
Borracho de nostalgia!

(José M  Huete García. Agosto 2013)

D.A.R.
CUANDO ME MIRAS.

Hay un tiempo sin dueño
Intransitivo
Sin nombre propio
Desconocido
Sin rostro
en silencio intuido

No me pertenece
Ni su perdón
Ni su castigo
Ni las deudas pendientes
Ni los motivos
De haberse perdido.

Es roce de alas
De paloma y olivo
Suave brisa
Que teje palmeras huidizas
Que aletean pestañas
Cuando me miras.

(José M Huete García. Agosto 2013)

D.A.R.
QUEJIDOS

Qué tristeza humedece
Los entresijos del alma
Con lágrimas otoñales,
que peregrinar tan cansino
Entre tanta hoja caída
Entre tanto pétalo maltrecho.

Qué temeroso queda el aire
Por haber denudado al roble
Por haber dejado en su tronco
Tantas señales
De un abrazo doloroso,
De un amotinado instante.

Qué renglones tan torcidos
Escribe solitario el poeta,
Cuando siente aterido
Que en silencio se despuebla
Lo que era jardín
Rebosante de colores.

Del nido trabajoso
El gorrión no se despide,
Ni el río de su cauce,
Ni la lluvia deja de ser barro,
Si no es tiempo lo que transcurre,
Sino uno tras otro los quejidos.

(José M. Huete García. Agosto 2013)
D.A.R

jueves, 1 de agosto de 2013

EL DIA DEL CARACOL

Amor, tu sabes
Que el exceso de luz quema mis ojos,
Que sufro del mismo mal que los girasoles,
Espero impaciente cada rayo de Sol
Para apagar esa sed áspera que me deja la noche
Con mis viejas historias de ausencia
Que no logro perdonarme,
Pero es débil mi nervio óptico
Cuando de adivinarle lindes a la belleza se trata,
Que me desespera lo inalcanzable,
Que siento como piedras las horas
En que ese bípedo depredador
Sale a cazar ratones con cara de hambre,
Mientras despreocupado cuenta las flores
Que pudo comprarse a precio de sangre,
Que se me  ahogan las palabras
cuando en los remansos de tu piel
se hacen torrenciales,
que en catarata me desbordo
con el solo guiño de un lucero en tus ojos,
Que tiendo a ser cometa en el aire
Que de sus cuerda se desprende
Y el vértigo me produce alaridos de pavor
Si navego por las incógnitas
De los espacios grandes.

Por eso te ruego que no me reproches,
Si al tomar ese color malva la tarde,
A ti me acerco con el paso cansino
De un caracol asustadizo
Que a su espalda carga a buen resguardo
Todo lo que tiene,
Si estoy tan acobardado que solo me atrevo
A dejar de mi caminar esa pegajosa huella
Que de un rato a otro
Se seca sin mas transcendencia.

Pero por favor,
Por ser tan poca cosa no me desprecies
Y permíteme que con solo el roce de tu sombra
Sobre mis mismo me cobije
Hasta que llegue la noche
Y en luciérnaga me torne,
Que con esa luminosidad tan fugaz
Es cuando lo pequeño se multiplica
Y de los sueños
Brotan como caños las pasiones
Y los perdones…

(José M. Huete García. Agosto 2013)

D:A:R:

martes, 30 de julio de 2013

AMANTE DE TODAS LAS HORAS

Podría ser el gélido amante de Invierto,
el aire aterido
que en tus brazos se detiene,
y sientes en el abrazo vacíos de hielo.

Podría ser el atrevido amante de Primavera,
el suspiro transgresor
que en tus surcos secretos
deposita simientes de hierba tierna.

Podría ser el ardiente amante de Verano,
viento abrasador
que a fuego lento cuece tus sueños,
hasta que maduren dulces o ácidos.

Podría ser el cansado amante de Otoño,
pasos anegados de lluvia,
que escribes las mas tristes historias
en los humedales de tus mejillas acuosas..

Mas  nunca podría ser el amante
que se marchó tras el olvido,
el que nunca agotó las horas
para hallar en ti su estación de destino.

(José M. Huete García. Julio 2013)

D.A.R.

domingo, 28 de julio de 2013

APÓSTROFE

Tienes la apacible tenacidad de la brisa
que deshoja mi silencio
en cada letra, en cada palabra que escapa
para ser poema,
para hacerse señal y divisa
de otro tiempo
en que el pentagrama gime
bajo el peso de tanto sentimiento.

Ya no será torrente la tristeza
ni el mar el vasto horizonte
por donde navegan soledades
de desarbolados mástiles,
ni la lluvia el perenne lagrimeo
con que se deshojan lo sauces,
ni el arco iris el viejo puente
que atraviesa un cansado corazón
melancólico y andariego.

Me quedaré preñando armonías
en el mas recóndito escondrijo
de tus sureñas latitudes,
desabrocharé luceros en las noches
para que en las ciénagas
donde naufragaba mi alma
solo quede el color de las petunias,
el cárdeno atardecer en tu mirada.

Y si estando a tu lado
en este paréntesis que el tiempo
nos concede para ser  exuberante
ritual de la palabra que se explaya
en cadencias de mar enfervorecídas,
el azar ha de ser el apóstrofe
a que la realidad obliga,
admitamos que nunca tuvimos
mas que el simulacro de una llave
para abrir la puesta de lo eterno.

(José M Huete García. Julio 2013)

D.A.R.