EL GRAN RETO
De la trasparencia de tu mirada
me queda un espejismo
y un infinito mar abierto
Navegarte sin tocar puerto
y en cada ola dejarte un te quiero
es mi reto
De la húmeda huella de tus labios
sabor a fruta que madura despacio
cuando ávido muerdo la pulpa
Beber y beber la alegría
del provocativo mohín de tu boca
si emborracharme me toca
De tu alma blanca
me queda ese canto juguetón
de las golondrinas
Esa primavera colgada
del viejo alar de mis soledades
del centro de un corazón
que dejó de ser imperturbable
Hay un sueño
al final de cada escalera
Yo estoy subiendo
mis peldaños
y aun voy llegando
al septuagésimo
de un corazón enamorado
(José M Huete García. Mayo 2016)
D.A.R
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