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martes, 19 de marzo de 2013


SUAVE ME INVADES

Imperceptiblemente,
algo se mueve
en los cauces sombríos
de la sangre pacificada
de mis otoños,
algo se yergue
que otra vez me convierte
en árbol fuerte.

Delicadamente,
brotan juncos adyacentes
a los remansos
de mis primaveras consumadas,
agostadas,
una piedra plana
rebota silenciosa
en mis aguas calmadas.

Sinuosamente
penetra la luz
del día que nace
en melodías del alba,
mis heridas
cauterizan poco a poco,
los claveles rejuvenecen
en labios rojos.

Inevitablemente,
todo florece
hasta en los rincones
de la savia ausente,
un nuevo río fluye
hasta que un sediento mar
lo engulle…
¡Es el aroma de tu alma!

(José M. Huete García. Marzo 2013)

5 comentarios:

  1. !"El aroma de tu" cuerpo! jajajajajajajjaaja

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    1. No, no soy mala, es que con eso de alma me acuerdo de muerte y me da yu yu jajajajajjajajaja.

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  2. Bellísimo y sublime poema, en cada una de tus letras destilas amor, que dulzura, que sentimientos tan bellos mi querido poeta. Un beso.

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