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martes, 1 de septiembre de 2015

EN EL TEMPLO DE TU MEMORIA

Solo hay un templo
en el que entro
con el alma genuflexa
con el sentimiento cohibido
con las manos en reverencia
y en los labios
la palabra enhebrada
en salmos de alabanza
como rezo
de obligada observancia

Ese templo de la memoria
sin incienso ni cera
sin frías vírgenes
hechas de madera
de piedra
sin pecado concebida
sin rincones oscuros
para doblegar la rodilla
y rezar la penitencia

Ese oratorio
hecho de escombros
de sueños
y que tu recuerdo cobija
hecho de instantes sublimes
robados al olvido
de tu raíces de madre
y el incensario que expande
aromas de hembra
viva y desinhibida

Y es en las venas
donde el sentir es sangre
donde fluye esa melodía
de  eternidades
que henchido
mi corazón te dice:

“Así te amé
Como el lirio a la primavera
  Así me amaste
Como el surco a la simiente
  Así nos amaremos
Como la vida a la muerte
Como el miedo a la certeza”

(José M. Huete García. Agosto 2015)

D.A.R.

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