Seguidores

viernes, 28 de diciembre de 2012

LAS MUSAS NO ESCRIBEN

Qué difícil se hace encontrar las palabras justas, exactas,
Juntarlas, ordenarlas, darles un sentido en el pensamiento,
Elucubrar unos versos, mimarlos entre los dedos,
Amamantarlos, dialogar pacientemente con ellos,
Convencerlos de su importancia, de los adecuado de su atuendo,
Para que cuando se da a estas teclas, en estas cuartillas
Blancas, inhóspitas, permanentemente hambrientas.
Aparezcan sobre ellas, danzarines los sentimientos.

He aprendido que las musas son tiranas, exigen, apremian,
Te prometen mil placeres si en tinta las conviertes,
Si les entregas la sangre, el sudor, las lágrimas,
Si ante ellas te denudas y pueden olisquear hasta tu alma,
Se visten insinuantes, provocativas, con tules y sedas
Y a cambio de tus fantasías noches de lujuria te prometen,
Y si de tu tristeza se apropian te susurran palabras de muerte,
Son vagas e impertinentes nada te regalan, ni de partos entienden.

Mas que haría yo, si me abandonaran, si me repudiaran,
Si cuando la tristeza, la soledad y el llanto m embargan,
No pudiera copular con ellas hasta hacer poema mis lágrimas,
Qué haría yo si cuando lleno de nostalgia ni pudiera
Gritar a La Luna estos aullidos que anhelantes te llaman,
Que  haría yo si cuando llega el alba, en el horizonte no te reflejaras
Si la esperanza se me quedara muerta en la garganta
Si en un poema no pudiera mostrar como estás en mis entrañas.

(José M. Huete García, Diciembre 2012)

No hay comentarios:

Publicar un comentario