LARGA NOCHE DE AUSENCIA
Qué largo se hace el camino de la noche
cuando indiferente marcha hacia su letargo
entre candiles de soles
y el colorido reverso de su esencia
Que pesadumbre va dejando en el alma despierta
cuando uno a uno va traspasando los dinteles
de cada puerta de esas desnudas estancias
donde tiritando se refugia la esperanza
Que lejano se escucha el aberrante propósito
que a las doce en punto del mediodía
se declaró con inequívoca energía
que la ausencia sea inicio de la esperanza
El pensamiento se hace tormento
La rabia encrespa las buenas maneras
de ese océano de la pasión que se enajena
cuando de nada se van llenando las horas
Qué infinitas se hacen las distancias
que separan los sueños tibios de aromas
de este yacer de la soledad que se adormece
entre sábanas nunca estrenadas.
(José M. Huete García. Mayo 2015)
D.A.R.
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