Seguidores

lunes, 18 de noviembre de 2013

REENCUENTRO

No ha de quedar desnuda la palabra
de su mas profundo acento,
cuando dos corazones la pronuncian
con reverencia,
que la hace transgresora y libérrima
mas allá de las consensuadas letras.

Ayer, allí junto a las nostalgia ya añeja,
en largos tragos de vino
a veces amargo, a veces dulce y cálido,
con los ojos buscándose en la mirada
me has enseñado tantos acentos,
tanto punto suspensivo entre pausas.

Se hacían vendavales de voz
los suspiros que guardaba el aire,
las manos renacían de viejos nardos,
la piel se hacía frondosa como el árbol,
iban reverdeciendo hojas secas
con su espalda cargada de pesares.

El tiempo iba muriendo entre verbos
rotundos, enfebrecidos,
dolientes en la acústica de los labios,
se desmadejaba sin justificaciones
las efemérides que iban datando
la acronía de nuestros silencios.

Y el viento se posó en nuestro pecho,
el mar afloró profundo en la espuma,
el reloj fijó sus manecillas
sobre cada retazo de la memoria,
sobre la certeza avivada en reencuentro
del unísono sonido del mismo verso.

(José M. Huete García. Noviembre  2013)

D.A.R.

No hay comentarios:

Publicar un comentario