TRAS LAS CORTINAS DEL OLVIDO
Ni siquiera
cuando pasa por mi silencio
el vendaval de tus labios
de tu piel como hoguera
de tus manos hallándome en los rincones
y queda al descubierto
la desnudez de mis soledades
consigo que un suspiro atestigüe
que alguna vez antes que cenizas
en mis páramos hubo fuego
Me causa tanta angustia
la visión de estos quietos rescoldos
reclamando respeto
porque alguna vez hubo unos ojos
que miraron de frente y sin miedo
Un sentimiento que traducía
en tus oídos la voz del viento
Un corazón tan sincero
que seguía palpitante de pasión
aunque viera ese abismo
donde todo final se hace cierto
¿Donde tañen ahora el arpa y los laúdes
con que los dedos arrancaban acordes
en las cuerdas de tu cuerpo?
¿Donde se queja la guitarra
prendiéndole a la noche
acordes de nostalgia desesperante?
¿Donde los violines llevan a cabo
su ritual de la cordura
Para que en las calles no aúllen
solo los perros hambrientos de la locura?
Tengo mil motivos
para gritar con ira contra el tiempo
Para acusar de traición a la voz
que me decía que la mas dulce pasión
es la que corre a esconderse
traviesa tras las cortinas del olvido
(José M Huete García. Noviembre 2015)
D.A.R.
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