DESDE EL TEJADO
Como gato sobre el tejado,
indolente pero avispado,
noctámbulo cazador de sueños,
veo como camina el tiempo
sobre ese asfalto,
de mi sentir tan lejano.
Me abrigo con el viento,
tengo un agujero de hojalata,
cuando acecho una gata rebelde,
que de la lluvia me protege,
o de pizarra negra y reluciente,
si es una gata sumisa y coqueta,
la que me reclama impaciente.
Si siento que el hambre
se hace exjgencia acuciante,
hago un guño provocativo
a una avecilla inocente,
la engullo sin remordimiento,
en el cielo un ojo reluciente
me dió su consentimiento,
porque de siete vidas
he de ser superviviente.
Solo hay algo que me inquieta
que nubla mis ojos de tristeza...
Que después de mis site muertes,
pueda reencarmene,
en uno de esos seres tan extraños,
que caminan tan apresurados,
pretendiendo que el tiempo no pase,
que aún no saben,
que la diferencia entre ayer y mañna,
es el tejado en que hoy duermes.
¡Si alguna vez dejo de ser gato,
y he de ser hombre,
que siempre haya un tejado
donde una gata me espere!
(José M. Huete Garcia, Octubre 2012)
Cuando el espíritu palidece ante lo irresoluble de la realidad, que nos castiga y amedrenta, la palabra teje ese manto que nos protege, que nos abriga, que nos devuelve a las horas de la inocencia, LA POESÍA. Aquí me encontrareis desnudo de equipajes inservibles, transpirando los sentimientos mas esenciales de mi devenir. Con mis dolores de parto, con mis alegrías rescatadas con la inmensa potencia del lenguaje mágico que surge en la espera interminable de saberme entero e indestructible.
Muy bueno. De seguida me acordé de la pelicula La gata en tejado de zinc caliente.
ResponderEliminarhttp://youtu.be/rDk0JtQHc0A
Quien sabe lo que encuentras es un fantasma de Elizabeth Taylor????
Un beso
Flor
Ahh..un gato silvestre converso a urbanita sin abandonar sus raíces...muy bueno...jeje...adoro los gatos...
ResponderEliminar