CAMINO INTERIOR
He andado un largo camino,
por anchas autopistas,
y en el rostro sentía la tibia caricia
de una brisa que serenaba
los ineludibles instantes
de la inquieta espera.
Otras veces he caminado
por estrechos senderos
con el viento en contra,
y una lluvia tan seca
que solo dejaba sal e mis mejillas,
y perdí esa brújula
que me señalaba
el Norte de tu boca,
y embarranqué
en las playas perdidas
de la desesperanza.
Unas veces he sentido
que tocaba el cielo,
que ese aroma de lo eterno
era el que me inundaba,
cuando estabas conmigo.
Otras veces, el vértigo
de asomarme al abismo
de la soledad y el llanto,
cuando te has despedido.
¡Y a todo he sobrevivido
aunque solo me quedara
la desnudez del vacio!
Pero, nunca encontré la respuesta
que saciara a mi corazón insumiso,
y a hacerme la pregunta exacta
quizás, nunca me he atrevido...
(José M. Hete García. Julio 2012)
Cuando el espíritu palidece ante lo irresoluble de la realidad, que nos castiga y amedrenta, la palabra teje ese manto que nos protege, que nos abriga, que nos devuelve a las horas de la inocencia, LA POESÍA. Aquí me encontrareis desnudo de equipajes inservibles, transpirando los sentimientos mas esenciales de mi devenir. Con mis dolores de parto, con mis alegrías rescatadas con la inmensa potencia del lenguaje mágico que surge en la espera interminable de saberme entero e indestructible.
Precioso Mi Poeta!!
ResponderEliminarBesitos
Flor
Me quedaba la desnudez del vacío, que hermoso y a la vez cuanto dolor hay en ese todavía que se queda a pesar de la no espera. La congoja invade el poeta en ese decir autentico. Admiro siempre tu poesía y tu persona porque sé que tu alma es limpia a pesar de los tropiezos uno se levanta y sigue andando. Para adelante con todo el impulso. Abrazos y bienvenido a mi blog.
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